1. Problemas en la costa del mar.

   ¡Alejarse de mis moradas! Dijo un enfadado pulpo al salir a la superficie.
   ¡Esta es mi propiedad! ¡Fuera!
   Al instante tomo varios tripulantes con sus tentaculos y empezo a sarandearlos y a aventarlos.
   ¡A todos les pasara esto si no se marchan!
   Parece que las advertencias no funcionaron, el pulpo empezaron a rodearlo, tuvo miedo. Dejo en paz a las personas y se escabullo. Se hizo de noche mientras el pulpo de lejos veia mas barcos y gente llegae a conquistar la costa donde habia vivido tan pacificamente.

   1. El octópodo azul de la primer imagen 🙂

   2. Uriel, vientos, escribiste desde el pequeño y furioso pulpo que aparece en la imagen. El título me encanta, está lindo y triste tu cuento, además de que muestra una realidad que vivimos, somos depredadores de ecosistemas. Ojo con la ortografía, lee en voz alta tus textos para que te ayude a identificar erratas. Muchas gracias

2. La traición a la tradición familiar

   Gonzalo Sánchez quería tener una experiencia más agradable, pero si alguien se enteraba lo considerarían un traidor. Se hizo de noche mientras pensaba que hacer, al día siguiente tendría que fingir ser parte de la banda para llegar al otro edificio. Cuando estuvieran distraídos, dejaría de tocar y se confundiría con el protagonista de la grabación, por el sombrero. El pañuelo del mismo color que el sujeto de la entrada le daría acceso al edificio, para que no descubrieran que Gonzalo había ido al salón Vázquez, que era la competencia del salón de su tía María Sánchez.

   1. Qué historia tan genial 🙂
      emm ¿Tu personaje toca el piano y tiene un pañuelo amarillo?

      1. No, te falló el pañuelo.
         🤭

   2. Diana, gracias, ¿será que es un violinista que se encuentra casi en la orilla, de pañuelo rojo como el hombre en el balcón del otro salón de pañuelo rojo y libreta en mano? Muchas gracias, la verdad fue un reto buscar a tu personaje, pero que buena historia, me gusta que hayas usado la traición es como un elemento muy especial de estos ambientes del antiguo oeste. Gracias

      1. Así es, correcto.

3. Nadando por las aguas gélida de la desconfianza
   -Amor, tú sabes que no suelo salirme de ruta normal, pero James insistió. Acabamos en un lugar bastante interesante, según él, la comida era muy exótica y en verdad lo era. También fueron Helen y Molly. El lugar era muy raro, pero había tanta comida que caía del cielo. James llevaba un sobrero blanco muy tonto y nos obligó a usar unas servilletas para esperar la comida. Elegimos un buen lugar, y a esperar.
   -¿Y eso que tiene que ver conque llegues a esta hora?
   -Que se hizo de noches mientras esperábamos la comida.
   Athur Dent

   1. Me explotó la cabeza xD está genial

   2. Arthur, buenísmo, es como la excusa perfecta que podría darle uno a su madre de por qué llegó tarde a casa. Por más que busqué no encontré a tu personaje.
      Dejas no completamente abierto el final pero sí con muchas posibilidades de interpretación. Muchas gracias

      1. Era uno de los tiburones, pero ahí me comí un nombre y por eso solo menciono a cuatro de cinco, posiblemente por eso es difícil de encontrar jejeje

4. «Solemnidad con una mano en la botella de ron»

   ¡Yo-ho! Camaradas, soy Bartholomew, gran bucanero y forajido, realicé más de 400 asaltos exitosos; quizá os preguntareis cómo llegué a esta embarazosa situación; Se hizo de noche mientras me disponía a realizar mi más grande golpe, pero un canalla sinvergüenza corrió la voz del jugoso botín y fui atrapado por estas sabandijas de agua dulce. Estos filibusteros me tienen paseando sobre la plancha a costa de las coordenadas del tesoro, lo único que conseguirán estos malditos es la dirección de un cofre vacío. Así es mis valientes, prefiero bailar con Jack Ketch a que estos truhanes consigan algo de mi ¡Aarrgh!
   -Ajelet-

   1. Excelentes recomendaciones musicales, me inspiraron mucho.
      Leyendo descubrí que el 19 de septiembre es el día internacional de hablar como un pirata.
      https://es.wikihow.com/hablar-como-un-pirata

   2. Si me dejo llevar por el hombre en la plancha entonces creo ubicar tu personaje, pero tengo la impresión de que no es quien creo. No conocía a Jack Ketch hasta tu cuento, ya que busqué la referencia vaya que le da un sentido especial a tu cuento. Se nota que leíste sobre hablar como pirata, lo lograste muy bien en tu cuento. Muchas gracias

5. La utilería barata del Salón del Pionero y el viejo Titán
   No creo siquiera que lo sepa, no ha cuestionado la presencia de algunos fuera de lugar, la pintura extra, los flashes, las batas blancas o el falso sol. Se hizo de noche mientras Foragido McDonald’s enterraba sus espuelas de plástico en Titán. El animal entrenado para frente camaras relinchar al viento, imagino que sabe mejor que su hombre, lo que significa ese escenario. Apagaron las luces y McDonald’s después de atar a Titán me golpea el hombro e invita al Salón del Pionero, al entrar lo encontramos, sentado al final de la barra, el… ¡Corte!

6. Tres días tratando de cruzar a la isla y justo ese día se le ocurre llegar al Wali. Conchesumaaaare… Tomamos el bote con todos los cabros y nos pusimos a remar, a ver si llegábamos al otro lado antes de que abrieran la página. Ya habíamos pasado el pulpo cuando de repente agarra al chico Jano, lo enrolla con el brazo y ¡abren la página, conchesumaaaare!
   Y así se hizo de noche mientras esperábamos como weones a que el cabro chico encontrara al Wali.

   1. Cris, buenísimo, me encantó que usarás el mismo libro para tu historia, en sí la forma de usar el libro, creo que sin decir mucho podemos quién es el personaje del que dependen todos en la imagen. Está genial el final.

7. Batalla de ultra mar fuera del mar

   Mientras despertaba el primero y último de los traidores cayendo como cena para tiburones desde la cima del barco pirata, mientras mis compañeros bebían vino enemigo y contaban parte del botín esquivando las incontables balas de cañón que volaban hacia ellos, mientras los ingenuos de nuestros oponentes abrían un cofre del tesoro vacío escandalizándose por el engaño sin percatarse de nuestra presencia se hizo de noche; y entre la confusión de la enérgica batalla, alejándome, de incógnito con el resto del botín, acostado en el cofre cual bañera flotante quitándome el sombrero para despedirme… descubrí, abriendo los ojos con claridad, que mis compañeros de batalla no bebían más que leche, jugando y gritando con espadas de cartón sobre las camas del orfanato creyéndose héroes legendarios que lo único que atacaron fueron mis sueños y mi imaginación.

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